Artá con los Maifren

30 de enero de 2010, 2º capitulo:
EL GAFE Y LA MUSA

Como en la salida anterior no estuve, por tanto no soy yo el gafe, y tampoco Yolanda, la Musa.

Suerte si hubo de reunir a tan diversa fauna de bikers venidos de todos los rincones de Mallorca: Campos, Pollença, Palma, Sencelles e incluso Santa Ponça en esta salida-minikedada Maifren.
Se inicia la salida bastante más tarde de la hora prevista con subida por el camino de cala Torta desviándonos a la derecha por el monte público de "sa Duaia", que viene en bajada pero muy lleno de restos forestales con el consiguiente peligro para Radios y Cambios(ya se lo decia Mateo a Yolanda:"Ten cuidado, que hay muchos palitos sueltos por aquí").
No fue a más gracias a la advertencia de Mateu. Tras salir de esta parte tan "delicada" iniciamos otra bajada mucho más técnica y que aquí si se vio que el gafe sigue entre los maifren. Tres pinchazos y un freno sangrante fue el resultado del tramo maldito que ya decia Rafa de Btters que no hay ocasión en la que no pase lo relatado y concretamente en ese tramo. Todo y eso es fabuloso y desconocido para el que os cuenta la historia.
Breve subida y algo de mosqueo por lo que es obvio, muchas esperas, viento y frió y que la gente quiere continuar. En el Restaurante Sa Duaia es donde inevitablemente nos cogen los de sa Pobla con Xisco y compañía, hacían la misma zona pero en otro horario y otra vertiente, ellos tiraban a la izquierda, más hacia el parque, y nosotros hacia cala Mesquida y demás.
Charloteo, compadreo, fotos y ...despiste. Yo por un lado y Pep "set i mig" con el móvil, nos olvidamos por un momento de la realidad y un poco más y continuamos con los Poblers. Bajamos y nos esperan tres maifrens, continuo y dudas en un cruce. Algo de descontrol, pero en cala Torta nos reagrupamos y un poco de merienda.
Proseguimos la ruta, el gafe de momento se ha escondido, pues todo va bien y llegamos hasta Cala Mesquida, unos por camino con Mateu haciendo el duro sacrificio de acompañar a los menos radicales, entre ell@s, Yolanda y perderse las maravillas de la trialera en subida hasta la mencionada cala.
El fuerte viento fue, si cabe, el detalle, no muy relevante en este tramo, más adelante, en la carretera fue ese mismo viento el protagonista. Llegamos hasta Cala Mesquida, todos menos uno por la ruta normal, el uno era yo que me acordé de un sendero de bajada muy empinado y no lo dude dos veces, pido disculpas al resto por no compartirlo pero cuando me di cuenta ya todos habían arrancado y no tuve tiempo de avisarles. Este pequeño sendero da a una especie de balneario a la izquierda de la cala.
Bajamos por las escaleras que dan a la playa y tomamos una de las partes más agradables de la aventura. Es destacable y muy recomendable la pasarela de madera de más de 500 mts. aproximadamente que se ha instalado sobre el sistema dunar de Cala Mesquida. Ya no solo el hecho de circular por él en bici, una sensación de ir por un woodparck, ligth eso si, pero esto y el hecho de disfrutar del paisaje que se ha creado con este montaje, es algo digno de elogiar a los responsables de tan acertada iniciativa. Que duda cabe que fue una de las cosas más fotografiadas de la jornada( y otra cosa que yo me se).
Ya queda poco, pero es igualmente precioso discurrir por el interior del bosque, con ese sendero pedregoso, arenoso y con raices, nada, que tiene de todo un poco y con eso llegamos a Cala Gulla, donde no se porque, una gran mayoría nos vamos por el pestoso asfalto hasta el inicio de la salida donde ese viento, que si antes no era relevante, ahora era un problema, de cara y por carretera que ha hecho que el final de la ruta halla sido algo deslucida. Eso y que al llegar nos diesemos cuenta de que faltaban un montón de gente que nadie sabía que ruta tomaron para el regreso, signo inequívoco del que el Gafe apareció de nuevo.
Por lo demás muy, pero que muy bien. Buen ambiente, ningún herido, ni herida, nuevas amistades como las de Juanga, Sandro, Guillem, Rafa o David. Estos dos últimos nos demostraron a muchos que para hacer lo que nos gusta no hace falta gastar un montón de dinero, o preocuparse por que la bici se ha hecho un rallajo, o por que no tienes lo último en cubiertas tubeless, los guantes de neopreno, goretex, etc. etc.. Ellos solo llevaban sus más que discretas máquinas, sonrisas y buen rollo, por ello gracias por haberos conocido. Tambien se sembraron en esta salida buenas vibraciones para la inminente kedada Bous del 27 de febrero. Pues nada, allí nos vemos si todo va bien y el Gafe se va con otro grupo.



Enlaces:
Ahhh¡¡ y...

Cap Salines-cala s'Almonia




Esta ruta la tenía a tiro de piedra, sin necesidad de trasporte y han tenido que pasar mogollón de años antes de llevarla a cabo. Siempre que iba al Faro del Cabo salinas tiraba hacia la Colonia de sant Jordi y dejaba la parte izquierda para una mejor ocasión. Esa ocasión llegó el otro sábado cuando por cuestiones varias se me brindó la ocasión para afrontar dicho reto. Lo de reto viene dado pues no es una ruta, digamos fácil por el mero hecho de estar bordeando la costa en esta parte de isla, en la que no se caracteriza precisamente por ser difícil y complicado, pues quien piense así se equivoca. Más que nada tentado por las recomendaciones de Damián (Kampestre666), que me habló muy emocionado de este itinerario, como dije, encontré una buena excusa para emprender tan misteriosa aventura.
Salgo de una ubicación poco usual, desde ses Salines y me dirijo por carretera asfaltada hasta el faro de Cap Salines. No opté por ir por la Colonia pues el tiempo del que disponía era bastante pero solo el suficiente para no llegar tarde a los compromisos. Una vez llego al punto real de la ruta, el Cap Salines , esta vez si tomo a la izquierda con, porque no decirlo, un no se qué en mi interior, de esas sensaciones que tiene uno cuando está a punto de hacer algo poco usual pero que tiene visos de ser especial, arriesgado o morboso, pues eso tenía yo. El paraje inicial no presagia nada de todo lo mencionado: piedras, matas y el mar a tu derecha.
Poco a poco voy viendo que la ruta hacia la Colonia era más facilota que la que había empezado hoy, que había también playas, si, pero lo que menos, por no decir que solo hay una, pero eso sí, me estaba gustando y solo de pensar que te recomiendan no ir solo con la bici, por lo de los acantilados que deberé superar, más inquieto estaba yo.
Debo recomendaros algo, los caminitos son muchos y es por ello que debéis tomar el más cercano a la vegetación que os cierra el paso por la izquierda, pues lo más normal es que al coger alguna alternativa que os acerque al mar quedéis parados sin salida. Eso también va a gusto del cliente, pues si te gusta practicar tu técnica, que la hay a espuertas, podéis tomar esos caminillos idóneos para trialear. Luego me diréis que esto no es enduro.

Tras varios kilómetros me encuentro ante mi primer dilema, es la primera torrentera. Tras pasar por el pou Salat(ahora el “Pou Basurero”)me encuentro con el citado torrente. Ni se que nombre le han dado al mismo, lo que si se es que acojona algo el ver donde tienes que ir y no saber por donde es mejor, el estar solo, sin cobertura de móvil y girarte detrás y ver lo que has hecho, o lo peor de todo, saber que los escollos que te esperan son peores que el que vas a intentar superar.
Nada, que tras estudiar las posibilidades de bajar, subir y no pegártela en el intento, sin más dilación afronto sin mucho problema la bajada, con una mano, la izquierda, soporto el condenado peso de mi foxi (como me gustaría una “Carbonara” en este momento) y con la otra, la derecha, será la encargada de sujetarme con los salientes de las rocas, ¡ahh¡, y la solvencia de mis nuevos zapatos, veremos lo que duran si nada más empezar les doy un tute como el que les estoy dando.
Estoy dentro, o mejor dicho, abajo. Me queda subir, se distingue mejor el sitio ideal para ello y es por donde voy y de nuevo me sumerjo en el estrecho camino que me llevará hasta el próximo reto.
Sigo discurriendo por ese sendero angosto, con multitud de pequeños escalones naturales y con la vegetación que te aborda por los lados intentado, en ocasiones, meterse entre tus piernas y complicarte la salida. No lo consigue todo y que lo intenta hacer siempre que puede. Con eso llegas a Cala Marmols, para mi una de las calas más preciosas y salvajes que he visto. El propio sendero te va llevando hacia abajo y sin más te encuentras ante un barranco, la cala a unos 40 metros y con un, llamémosle caminillo con un desnivel nada despreciable de un 90 % aproximadamente, por suerte es en descenso. Tras afrontar el mayor reto de la jornada usando la misma técnica que en el anterior escollo llego a la playa y tras varias fotos de rigor tanto a la playa como a la pared que acabas de bajar, subes la escalera que junto con el letrero del Govern quitan todo el encanto salvaje e inexplorado de tan esplendido paraje. Subo la cuesta de lo que aparenta ser el camino de acceso para vehículos hasta la cala y que en ese momento es del todo desaconsejable discurrir por él debido a lo maltrecho que se encontraba debido a las últimas lluvias, llego hasta una intercepción con varios caminos y tomo hacia la derecha para no meterme en zona privada para nuevamente enlazar con el sendero costero, es más cuando de nuevo lo cogí me equivoque y me iba directo a un callejón sin salida por lo que es recomendable cuando se termina la pista ancha no perder de vista las señales o fitas de piedra que hay y que te llevaran hacia la izquierda para retomar tu ruta establecida. En este punto me equivoque pues estoy en el tercer torrente a franquear, que no es como los hasta ahora logrados, sino todo lo contrario, casi es ciclable, eso sí, haciendo un corto rodeo. Pasaremos dejando a nuestra derecha una torre en forma de cilindro de color blanco que exactamente no entiendo su significado y que pudiera ser para uso militar como referencia de practica de tiro, eso es lo que supongo yo, ahora si no es eso, lo único que hace allí es estropear el paisaje.
Seguimos nuestro camino con el buen sabor de boca que nos ha dejado lo hasta ahora conseguido y con la inquietud persistente de lo futuro por descubrir. Tras continuar por el mismo tipo de sendero que has estado rodando y sin una sola escapatoria hacia la civilización que no sea hacia tu destino, o por el contrario, volver sobre tus pasos, ya que a tu izquierda solamente hay bosque y más bosque, sin un ápice de lo que pudiera ser una vía de escape en caso de emergencia y con la imagen de las raíces y matas que están allí , como queriéndote coger y engullirte hacia ese bosque embrujado, la verdad es que da algo de “yuyu”, ver que si te pasa algo en medio de la nada, de ese desierto de rocas y matorrales, una de dos, o por aire o por mar te vienen a buscar, es por eso que esta aventura, por simple que os parezca, no la hagáis solo, o antes de afrontarla, haced como yo, pasaros unos cuantos capítulos del Zumbao ese que se come bichos raros, el Último Superviviente, Bear Grylls y todo arreglado.
Ya nos queda menos, pero no por ello menos complicado, nuevo reto, nuevo escollo y otra vez a estudiar las posibilidades. Este a simple vista parece más complicado que el primero, más que nada por sus dimensiones, más alto y más ancho, pero con la salvedad de que no es tan empinado y se hace más fácil bajarlo como si de una escalera se tratara, tan solo necesitas escoger la trazada ideal y ya está. Una vez estés subiendo hazlo hacia la costa y podrás deleitarte con unas fabulosas vistas como las que he dejado constancia en las fotos, pues si algo tiene, a parte de emocionante esta ruta, son la cantidad de posibilidades graficas que te permite los parajes que iras viendo.
Llegamos a otro lugar digno de mencionar. Tras discurrir por sendero poco complicado, lo que agradezco después de lo que dejo, se divisa a lo lejos y sobre un gran peñal una edificación de una sola planta, en realidad es un antiguo cuartel de Carabineros, en desuso pero no con signos de abandono. Llego hasta él, unas cuantas fotos y ya se ve a lo lejos el final de mi ruta, pero ojo, eso no significa que se terminen tus problemas, o mejor dicho tu diversión.
Pasamos cerca de un Talaiot derruido y de un sembrado, y mira tu por donde, una nueva torrentera. Había calculado yo mal, pensaba que solo me quedaba la de Cala s’Almonia. De todas formas no es difícil de superar, solo algo de cuidado con la cabeza ya que las ramas de los pinos son muy bajas y curvadas envolviendo el camino para hacerlo más salvaje todavía.
No se si por equivocación o por que es así, sin comerlo, ni beberlo, empiezo a bajar y bajar con un escenario frente a mi de lo más bello, son las Casas de es Caló des Moro, de todas formas doy gracias por equivocarme, si eso es lo que pasó.
Subo por un sendero muy empinado dejando ese enclave maravilloso y vuelvo a coger el sendero que está en las últimas pero no por ello menos divertido. Todo lo contrario, es digno de mencionar para que los más endureros salvajes vengan para catarlo a pesar de que pueda tener apenas 300 metros. Sigilosamente te lleva hacia él, que cuando te das cuenta ya estas bajando y es por ello que cuando hallas subido de la ultima torrentera, bajes el sillín y te prepares porque vienen curvas. Es una bajada, como digo, corta pero muy intensa que precisa de bastante técnica y que tras pasar por el espeso túnel de matorrales desemboca en Cala s’Almonia fin de nuestra gran aventura.
De allí sales por una condenada y pestosa escalera que te deja en la zona urbana de cala Llombards que siguiendo las indicaciones del wikiloc te devuelve al inicio de la ruta sin más problemas que el no llegar tarde a tu cita posterior.

Pues listo, aquí os dejo este hermoso relato, espero que os resulte ameno, es más, no se como pregunto tal cosa si ya se que todos lo son. Un saludo.



!Aahhh¡¡, Se me olvidaba:
30 kms. mas o menos y salí a las 09:40 y terminé a las 13:05 horas,
el IBP como el IPC, el tiempo de cO...a, y otros datos más sin importancia...


Una Marathon para empezar el año. CAMPOS-SANT JORDI



Ya estoy aquí, dispuesto ha daros rollo por segundo año y que mejor que empezar con una ruta larga, algo cicloglobera pero muy adecuada para todo tipo de biker.
De Campos a Sant Jordi (Palma): 75 kilómetros ida y vuelta, poco desnivel y mucho asfalto, eso si, por vias poco transitadas o cicloturisticas y lo poco de pista de tierra que encontré nada despreciable, eso si, no busques enduro radical, ni descensos vertijinosos, todo eso lo encontrarás en otros sitios no muy lejanos.
Esta ruta, más que nada, es para el que busca algo poco complicado, hacer kilómetros, subida constante pero no destructora y paisajes refrescantes, y sobre todo, poco trafico. Esto es lo que se encontrará quien haga este itinerario. Todo y nunca haber hecho ninguna aventura de varios días, tipo camino de Santiago, pedals de foc, etc. puedo decir que es ideal para, si tienes en mente alguna ruta de este tipo- más bien la primera que no la segunda-, esta vuelta es muy recomendable a modo de entrenamiento.
Estaba de estreno con mi nuevo rotor, que se ve que hicimos en montaje correcto, pues no se ha movido ( me paso ese percance en el último montaje) y elegí esta ruta gracias a una entrada de Miquel de Llucmabike, en la que veníaa del Arenal y subía a Cura y me picaba la curiosidad, no es nada difícil encontrar la ruta, está archi-señalada, es más, con un cartel que descubrí, y que nunca había visto, muy curioso, el que veis en el centro.
Inicio en Campos, rumbo hacia Es Tast de Porreres y tirar hacia Llucmajor por son Frigola, algo de rodeo por Cami de son Fullana y cuando hemos tomado hacia la fuente des Péleg seguimos el camino hacia Llucmajor sin girar en el camino des Pontarró. Seguiré hasta enlazar con el cami vell de Gracia y nada más hacerlo, a los pocos metros giraré a la derecha en el cami de Coix Carro y al desembocar en la carretera de Algaida, frente a vosotros hay dos caminos. Elijo el de la izquierda el de Buniferri y voy hasta el cruce con el camino de Galdent, que será el que coja en dirección a las canteras y restaurante. Luego en el google earth vi otras opciones más cortas y de pista de tierra - la próxima vez será-.
Llego al cami de son Mendivil que tomo, dejando el cami vell de Algaida, actualmente muy idóneo para el ciclo turismo. Aquí es donde veo muchos letreros, con indicaciones de distancia y situación, Mapas y el que más gracia me hizo, el que comenté antes, le hice tres fotos. Y es que me dio uno de esos puntazos que me suelen dar cuando veo algo inusual, y es que el que veis es total: dos bicis, una de ruta(tachada con una raya roja) y una btt como la idónea para ese tipo de recorrido. Nada, que eso tan tonto me emocionó, que se le va hacer, si uno es sentimentaloide.
Tras subir varios kilómetros de pista asfaltada y tras bajar otros tantos llegamos a unas barreras abiertas donde nuevamente hay uno de esos letreritos tan cachondos y es cuando empieza la pista forestal bastante bien acondicionada, que solo se ve algo deteriorada en su parte central y casi siempre con bajada hasta su fin con una distancia de apenas cuatro kilómetros.
Ya se ha terminado la pista y al poco tiempo se funde en camino ancho de asfalto, ente se denomina de son Binisalom y que viene cuesta abajo hasta llegar a Sant jordi, solo una recomendación. Como he dicho es de bajada y que dura varios kilómetros, pues bien, si no vais muy bien de fuerzas pensad que luego hay que subirlos, ya sé, ya sé, que no todos estáis tan petados como yo.
Decido yo, porque soy UN CAMPEÓN, bajar hasta tan hermosa villa, desconocida para muchos, y que no es otra que sant Jordi. Tras vuelta de rigor y fotos, a la vez que averiguo cual sería el recorrido hacia Playa de Palma, regreso por el mismo camino por el que he venido (cuesta pestosa incluida), eso sí, parándome en los sitios o caminos donde veía huellas de caballos o bicis que me servirían en futuro para nuevas aventuras. Tras atajar varios kilómetros para no hacer tan larga y por cuestiones de tiempo, llegué a Campos tras unas cuatro horas y unos cuarenta minutos de buena ruta, sin mucha parada más que para la barrita y poca cosa más, eso si, sin un ritmo descontrolado, es más, volvía a ganar, fui el primero.
La verdad es que primera ruta del año no es, es más bien las tercera o cuarta, pero si la más desconcida. En el cajón dejo entre otras rutas hechas las de: Clonia de sant Jordi-EL PASEIG-, Sant salvador por el Castell(esta me mosquea un montón), pues es que no tengo GPS y para meterla en el Earth me resulta casi imposible pues se visualiza fatal y otras tantas con nocturnas solitarias. Todo a su debido tiempo, tenemos todo el año 2010 por delante para, con tranquilidad y esmero meterlas en el blog.-




Año Nuevo, Rotor Nuevo

Pues eso, para quitar ya la entrada de la nieve, la navidad, las campanas esas pijas, pues que mejor que mostraros mi nuevo juguete.





No es que sea muy nuevo, pues se quedaron en el año 2005 con este modelo, el RS04x, modificando el sistema de sujección del eje mediante un separador y la biela izquierda. Se mejora las bieletas dejandolas con un color negro anodizado y con tapa permanente en la parte interior ( se me perdió uno en el anterior). Se han añadido dos tuercas de aluminio en el cuerpo principal del pedalier que favorecen el que no se mueva éste al realizar la función de contra-tuerca, pero no deja de aconsejarte que pongas fijador de roscas de dureza media para que, una vez hallas realizado el reglaje personalizado del rotor, no se desenrosque el conjunto.


Bien, pues como he empezado el año , vago, vago, pero que muy vago, os dejo el album con diapositivas, y una vez más, cuando tenga un poco más de tiempo, en el mismo album meteré comentarios muy ilustrativos de como me fue el montaje.
Agradecer encarecidamente el apoyo, paciencia y buen hacer de Rafa de s'Escapada de Campos, y es que sin él, esto que vereis a continuación no hubiese sido posible. Y también, una petición, a ver si los de Rotor se gastan como mínimo unas cervezas, que con la publicidad que les hago y con el hecho de ser de los pocos, o quizás, el único que lleva su producto y que en realidad fue la revolución en el mundo del pedal, a la vez que da nombre a la empresa, que no tan solo fabrica este sistema, sino todo un gran surtido en productos para la bici.-